
Errores diagnósticos en los trastornos del neurodesarrollo.
El campo de investigación sigue abierto y no hay datos concluyentes que determinen si el síndrome de Asperger es una categoría distinta a la del autismo o se trata de la misma entidad nosológica. Los estudios futuros serán los que acaben determinando esta cuestión pero por el momento se incluye dentro del mismo espectro, es decir, se considera un trastorno del espectro autista (en el DSMV) o un trastorno del neurodesarrollo (en la CIE11).
Muy pocos psiquiatras de adultos tienen conocimientos precisos de los desórdenes del desarrollo del autismo, muy poco personal sanitario conoce las peculiaridades del síndrome de Asperger en las chicas y, de hecho, poca gente sabe qué es y cómo se muestra el Asperger. Aunque muchos padres y madres se quejan de que han sido incapaces de obtener el diagnóstico de sus niños o niñas, debido por ejemplo a que la Administración es «contraria a las etiquetas», la situación puede tornarse más desagradable para los familiares de personas más mayores sin diagnóstico o a quienes se les ha realizado un diagnóstico incorrecto.
Es frecuente, por ejemplo, encontrar adultos con autismo mal diagnosticado como esquizofrenia, los cuales no es de extrañar que no hayan respondido a la medicación convencional por lo que se les suministra gran cantidad de dosis de drogas siempre crecientes o simplemente se les institucionaliza en hospitales psiquiátricos. También sucede mucho en varios países que los niños y niñas que tienen diagnóstico Asperger y certificado de discapacidad al cumplir los 18 años y pasar una revisión por el tribunal médico pierden la valoración de persona con (dis)capacidad, como si milagrosamente ya no tuvieran Asperger, y con eso pierden el derecho a recibir becas específicas para alumnado con necesidades educativas especiales, ayudas sociales, derecho a recibir adaptaciones o a optar a las plazas específicas en empleo público, entre otras cosas.
Para encontrar todos los criterios aceptables para el diagnóstico es necesario contar con la anamnesis, sobre todo con los síntomas que han sido evidenciados desde el tercer año de vida en adelante y así tener la más detallada de las historias clínicas. Con esto se puede producir la situación de que el menor no tenga un diagnóstico concreto sino una presunción diagnóstica (un diagnóstico provisional) o una impresión diagnóstica ya que a edad temprana muchos rasgos son iguales en diferentes trastornos del desarrollo y diferenciar si se trata, por ejemplo, de un caso de TDAH o de un caso de Asperger puede ser harto complejo.
Los errores de diagnóstico:
En todo caso siempre será mejor no tener una etiqueta que tener una incorrecta ya que, en el segundo caso, podría estarse determinando la atención y tratamiento que recibirá esa persona en adelante y, si el diagnóstico es erróneo, con el tiempo se demostrará que es un tratamiento ineficaz y poco útil evitando una evolución positiva y real de esa persona.
Una de las principales razones de los errores de diagnóstico que ocurren en el caso de jóvenes y adultos con Asperger es debida a los arbitrarios agrupamientos entre adultos y niños en los servicios psiquiátricos. Además, casi todas las clínicas de población pediátrica finalizan el contacto con sus pacientes una vez llegan a la edad de 17 o 18 años y, si se requiere alguna ayuda suplementaria, se brinda mediante la remisión a un servicio psiquiátrico de adultos que habitualmente no está formado para atender la especifidad de la población en el espectro autista.
Fuentes:
– El diagnóstico ha de hacerlo un profesional cualificado. Enlace
https://mundoasperger.com/2016/03/el-diagnostico-ha-de-hacerlo-personal.html
Cuánta ayuda se necesita con un trastorno del espectro autista https://www.estherc43.sg-host.com/2019/06/cuanta-ayuda-se-necesita-con-un
– Ozonoff, S. et alii. (1991): «Executive ffunction deficits in high-functioning autistic individuals: Relationship to theory of mind». Journal of Child Psychology and Psychiatry, 32,7,1081-1105.
– Extracto del libro Mundo Asperger y otros mundos, de Sacha Sánchez-Pardíñez.
– El proceso de hominización. Sonia Sescovich Rojas:
https://m.monografias.com/trabajos81/procesos-huminizacion/procesos-huminizacion.shtml
– Trastornos que provocan anomalías del comportamiento social y que suelen aparecer en la infancia y adolescencia:
https://www.estherc43.sg-host.com/2019/06/trastornos-que-provocan-anomalias-del